Las fotos de mis hijos

Tema estrella en mi cabecita hueca estos días.

Cuando nació mi primer hijo, lo tenía clarísimo: NO. Subía muy pocas fotos al Blog y solía taparle los ojos a Marc en todas ellas. Sin embargo, con el pasar de los meses, fui teniendo cada vez fotos más cuquis que no era capaz de guardar para mi sola. A todos nos pasa ¿verdad?

No tengo muchas, ni en blog ni en Instagram, pero me estoy planteando tener NINGUNA.

¿Por qué?

  1. Porque el blog es mío, no de mis hijos.
  2. Porque no le he pedido permiso para hacer pública su imagen
  3. Porque me da miedo el uso que se pueda hacer de ellas.

No os quiero engañar, el punto número tres es el que más me preocupa. Últimamente estoy dale que te pego al coco con ésto. ¿La culpa? Pues la tienen todas las noticias que corren estos tiempo acerca de temas con menores.

Por otro lado, me da coraje tener esta preocupación porque no estoy haciendo nada malo. Que sí, que no tiene porqué pasar nada. Pero la sola idea me pone los pelos de punta.

Todo lo que subimos, queda para siempre (¡para siempre!) y no sabemos quién puede tener acceso a ello. No se, una cosa es contaros mi experiencia como madre y otra exponer a mis hijos a todos los públicos, sin límites ni filtros.

¿Alguien más en esta tesitura? ¿Sabéis que casi el 90% de las fotos que subimos son, nada más hacerlo, propiedad de otros?

En fin… que quizás me estoy emparanoiando.

Vosotros ¿subís fotos de vuestra prole?